Ansiedad, miedos y fobias

El miedo es una respuesta fisiológica que aparece ante situaciones peligrosas o amenazantes para el ser humano y que nos ayuda a huir o defendernos y así adaptarnos mejor al ambiente. La ansiedad aparece cuando se da esa misma respuesta de miedo ante situaciones que se perciben como peligrosas cuando realmente no lo son. 

Entre los trastornos infanto juveniles se encuentran el trastorno de ansiedad por separación, el trastorno de ansiedad generalizada, las fobias específicas, la fobia social, el trastorno de estrés postraumático y el trastorno obsesivo compulsivo.

• El trastorno de ansiedad por separación, donde aparece mucha angustia cuando el niño o el adolescente se tienen que separar de sus padres porque tengan que ir al colegio, a excursiones, se tienen que ir a la cama, tienen que quedarse con algún familiar, etc. Los momentos en los que se deben separar de los padres crean en ellos un miedo desproporcionado para la edad evolutiva del niño. Responden con una negativa a quedarse con otros familiares. Muchas veces sufren ansiedad por temor a que la muerte los separe de sus padres, o sean ladrones o monstruos los que lo hagan.


• El trastorno de ansiedad generalizada (TAG) se caracteriza por tener ansiedad ante situaciones que parecen normalmente en la vida, como presentarse a un examen, aprender una actividad nueva, miedo al fracaso, anticipar problemas futuros o rememorar fracasos pasados.


• Fobias específicas. En los niños se puede presentar fobia a la oscuridad, a los ruidos (de fuegos artificiales, explotar globos), a la sangre, a quedarse solos en su habitación y otras situaciones específicas.


• Fobia social. Se presenta más en la adolescencia que en la infancia, donde las relaciones sociales se hacen cada vez más importantes. Por miedo al ridÌíulo o vergüenza evitan situaciones sociales.


• El trastorno de estrés postraumático. Se desarrolla en niños que han sufrido un accidente, que hayan sido víctimas de maltrato y abusos sexuales, víctimas de terrorismo o catástrofes naturales.


• El trastorno obsesivo compulsivo (TOC). Aparecen pensamientos obsesivos y comportamientos que crean malestar al niño o adolescente.

Como en toda terapia infanto juvenil, el objetivo sería reducir y eliminar los síntomas ansiosos. La terapia que se utiliza sería la cognitivo conductual, la psicoeducación familiar y según el caso exponer al niño o adolescente a la situación temida. Con ello fomentamos la adaptación y creamos herramientas de afrontamiento.